Beneficios de la vitamina C más allá del sistema inmunológico

La mayoría de las personas piensan en la vitamina C como el suplemento que toman cuando se sienten un poco mal.

Sin embargo, es posible que no se den cuenta de que la vitamina C hace más que simplemente reforzar el sistema inmunológico. A menudo se la pasa por alto como un suplemento diario, aunque en realidad ofrece una larga lista de beneficios.

En este artículo, profundizaremos en otros beneficios de la vitamina C y cómo tomar este suplemento puede mejorar la salud general.

¿Cuáles son los beneficios de la vitamina C?

Veamos todos los beneficios que la vitamina C puede aportar a nuestro organismo. Primero, hablemos de lo que hace en el sistema inmunológico. Aunque es habitual tomar este suplemento para reforzar el sistema inmunológico, la mayoría de nosotros no sabemos realmente cómo ayuda al sistema inmunológico.

La vitamina C es un antioxidante. Básicamente, eso significa que protege las células de los radicales libres dañinos. Esta capa de protección mantiene las células sanas y actúa como una línea de defensa adicional contra las enfermedades y la inflamación causadas por el estrés oxidativo.

Los glóbulos blancos son otra línea de defensa clave del sistema inmunológico. La vitamina C estimula al cuerpo a producir más de estas células para que pueda combatir las infecciones de manera más eficiente.

Los beneficios de la vitamina C para reforzar el sistema inmunológico pueden recibir la mayor atención, pero tomar un suplemento de vitamina C en realidad favorece varias otras funciones del organismo.

Mejora la función cognitiva

La pérdida de memoria relacionada con la edad y otras afecciones cognitivas más graves, como la demencia, están relacionadas con el estrés oxidativo y la inflamación crónica. Algunos estudios han demostrado una conexión entre los niveles bajos de vitamina C y la demencia.


Los niveles bajos de vitamina C también se han relacionado con confusión, niebla mental y dificultad para concentrarse.

Promueve una piel sana

La vitamina C debería formar parte de la rutina de cuidado de la piel de todos. En primer lugar, los antioxidantes de la vitamina C pueden proteger la piel contra los daños del sol. También puede aclarar la hiperpigmentación, que es un signo de daño solar.


Si desea mantener su piel joven, la vitamina C también puede ayudarle. La vitamina C promueve la producción de colágeno, que ayuda a la estructura y elasticidad de la piel. En otras palabras, la vitamina C puede ayudar a prevenir las arrugas.


El papel de la vitamina C en la producción de colágeno también puede ayudar a la curación de heridas y disminuir las cicatrices.

Importante para la salud del corazón


Algunas enfermedades crónicas, como las enfermedades cardíacas, son causadas por el estrés oxidativo. Básicamente, los radicales libres dañan las células y causan inflamación, lo que aumenta el riesgo de sufrir problemas de salud crónicos con el tiempo.


Así como la vitamina C funciona como antioxidante en el sistema inmunológico, protege las células del daño de los radicales libres y de la inflamación crónica que, con el tiempo, conducen a enfermedades cardíacas. Algunos estudios también sugieren que la vitamina C podría ayudar a reducir la presión arterial.


Apoya la salud de los huesos

El colágeno no es sólo para la piel. Cuando la vitamina C estimula al cuerpo a producir más colágeno, los huesos también se benefician. El colágeno es uno de los principales componentes estructurales del tejido óseo. De hecho, los estudios han asociado la ingesta de vitamina C con la densidad ósea .

Ayuda a aumentar los niveles de hierro.


El hierro produce glóbulos rojos y ayuda a transportar oxígeno por todo el cuerpo. Cuando no se tiene suficiente, se desarrolla una afección llamada anemia.


Si sigue una dieta basada en plantas, podría correr el riesgo de sufrir anemia porque su cuerpo no absorbe tanto hierro de fuentes vegetales. Tomar vitamina C con hierro puede ayudar a que su cuerpo absorba más.


¿Cuáles son algunas de las mejores fuentes de vitamina C?

La vitamina C es un nutriente esencial, lo que significa que el cuerpo no puede producirla por sí solo. Debes obtener la cantidad suficiente a través de la dieta o de suplementos. También es hidrosoluble, lo que significa que una dieta variada probablemente te proporcionará suficiente vitamina C.


Las personas que no comen muchos productos agrícolas, fuman o toman ciertos medicamentos tienen mayor riesgo de sufrir deficiencia.

Algunas fuentes de vitamina C incluyen:

  • Naranjas y jugo de naranja
  • Kiwi
  • Pomelo
  • Fresas
  • Cantalupo
  • Pimientos dulces
  • coles de Bruselas
  • Brócoli
  • Tomate
  • Papa

Tomar un suplemento también es una forma sencilla de garantizar que obtienes suficiente vitamina C. Hay muchos factores que pueden influir en la elección del mejor suplemento, como el precio, la calidad y los estándares de fabricación.

¿Cuánta vitamina C debo tomar cada día?

La cantidad diaria recomendada (CDR) de vitamina C para adultos es de 60 a 75 miligramos (mg) por día. Sin embargo, en algunas situaciones puede resultar beneficioso tomar más de esta cantidad.

Por ejemplo, aumentar la ingesta de vitamina C puede acortar el tiempo que se está resfriado o ayudar con la deficiencia de hierro.

Puedes consultar nuestro artículo sobre cuánta vitamina C tomar al día para obtener más información.

El nivel máximo de ingesta tolerable (UL), o la cantidad que se considera “demasiado”, es de 2000 mg por día.

Consumir demasiada vitamina C no es necesariamente peligroso, pero puede provocar síntomas levemente incómodos, como malestar estomacal y acidez de estómago. El cuerpo eliminará cualquier vitamina C innecesaria a través de la orina.

Conclusiones clave

La vitamina C es un nutriente importante para mucho más que sólo el sistema inmunológico.

La vitamina C también reduce el riesgo de enfermedades cardíacas y otras enfermedades crónicas, mejora la salud de la piel y los huesos, favorece la función cognitiva y aumenta la absorción de hierro.

Aunque la vitamina C se encuentra en muchas frutas y verduras, es fácil sufrir deficiencia si no se consumen estos alimentos con frecuencia. La vitamina C es soluble en agua y solo se puede obtener a través de la dieta.

Si quieres asegurarte de que obtienes lo suficiente, un suplemento como Naked C es una buena opción.