En los últimos años, el mundo del fitness ha adoptado una mentalidad mucho más militarista, de "sin dolor no hay ganancia", que la que solía ser común. Y, si bien es fantástico que la gente se tome el fitness más en serio y disfrute más de sus entrenamientos, muchos expertos advierten que este enfoque incondicional y total del fitness podría ser un error.
La realidad es que puedes entrenar demasiado, con demasiada frecuencia y con demasiada intensidad, lo que puede llegar a provocar daños importantes en tu cuerpo. Este estado, conocido como sobreentrenamiento, es una afección muy grave que, como mínimo, resulta contraproducente para todos tus ambiciosos objetivos de fitness.
¿Qué provoca el sobreentrenamiento? ¿Cuáles son los síntomas? ¿Cómo se puede evitar?
Demasiado de algo bueno
La verdad es que los músculos no crecen ni mejoran mientras se hace ejercicio, sino que esa actividad proporciona el estímulo para las mejoras deseadas, lo que permite que el cerebro sepa que la situación ha cambiado y que se requiere más de los músculos para satisfacer las demandas del mundo exterior.
Sin embargo, estas mejoras se producen cuando estás descansando. En base a esto, muchos entrenadores explican la situación con esta fórmula simple y comprensible:
Entrenamiento = Trabajo + Descanso
Pero, ¿qué pasa si no le das a tu cuerpo el tiempo suficiente para recuperarse de tus entrenamientos? En esa situación, tu sistema ya está sacudido y tus músculos ya están comprometidos.
Por lo tanto, exigirles más en ese estado solo les hará más daño y no se producirán mejoras significativas. Así es como se produce el sobreentrenamiento.
Qué buscar
Entonces, ¿cuáles son los síntomas del síndrome de sobreentrenamiento ? Debido a que intervienen tantos aspectos de la fisiología, el sobreentrenamiento puede manifestarse de muchas maneras diferentes. Sin embargo, los síntomas más comunes y notorios incluyen:
- Disminución del rendimiento atlético
- Falta de progreso
- Fatiga
- Depresión
- Cambios de humor
- Trastornos del sueño
- Problemas digestivos
- Aumenta el dolor muscular y articular.
- Pérdida de apetito
- Sed extrema
Mantener el equilibrio
Está claro que hay buenas razones para evitar el sobreentrenamiento.
Pero, ¿cómo? Una vez más, el truco consiste en proporcionar el estímulo necesario durante los entrenamientos para desencadenar mejoras musculares y, al mismo tiempo, permitir que esas mejoras se produzcan.
En primer lugar, esto requiere que te tomes suficiente tiempo libre entre los entrenamientos y que te asegures de que tus entrenamientos sean apropiados para tu nivel de condición física. Esto significa tomarte días libres durante la semana, en los que no te ejercites en absoluto o te dediques a un tipo diferente de entrenamiento. Si normalmente levantas pesas, por ejemplo, usa tus días de descanso para cuidar tu cardio.
Pero el descanso también incluye el sueño, y un sueño adecuado es absolutamente vital, ya que es cuando se produce la mayor parte del trabajo de reconstrucción. Para la mayoría de las personas, esto significa no menos de 8 horas de sueño cada noche, pero, según su situación personal, es posible que necesite incluso más.
Por último, no se puede llevar a cabo ningún trabajo de reconstrucción sin los materiales adecuados. Cuando se trata del desarrollo muscular, esos materiales se obtienen a través de la dieta, principalmente en forma de proteínas . Esas proteínas se descomponen en sus aminoácidos individuales, se reorganizan, se reestructuran y se reutilizan para crear lo que el cuerpo necesita en ese momento.