El invierno puede ser una época complicada para los deportistas. Incluso si puedes realizar la mayoría de tus entrenamientos en interiores, los días fríos y grises pueden minar tu energía y motivación.
Lamentablemente, el invierno es el momento perfecto para prepararse para todos los objetivos del verano. Entonces, ¿cómo se puede seguir avanzando mientras los días son fríos y cortos?
Aquí te presentamos cinco consejos para hacer ejercicio en invierno que te ayudarán a mantenerte motivado.
1) Aprenda a amar los entrenamientos en climas fríos
Hay muchos deportes de invierno desafiantes y emocionantes que solo se pueden disfrutar cuando el suelo está cubierto de nieve.
Al participar en una de estas actividades, ya sea esquí alpino, esquí de fondo o patinaje sobre hielo, tendrá algo que esperar con ilusión durante el invierno.
Estos deportes de invierno también pueden utilizarse para complementar tu rutina de entrenamiento habitual y aprovechar el progreso que has logrado durante el resto del año.
2) Desarrollar músculos en invierno
Por mucho que a todos les encante la idea de aumentar su volumen (con la libertad de comer enormes cantidades de alimentos que quizás tengas que rechazar el resto del año), la realidad puede ser bastante dura.
Después de todo, a todo el mundo le gusta verse bien. Sin embargo, aumentar el volumen puede ocultar toda esa definición que tanto te costó desarrollar el resto del año.
Aquí está la buena noticia: nadie lo notará durante el invierno.
Si bien esto no es una excusa para abandonar por completo los hábitos alimentarios saludables, a menudo hace que las personas se sientan más cómodas al aumentar algunos kilos.
3) Consigue un compañero de entrenamiento en invierno
La responsabilidad es una parte importante de cualquier rutina de ejercicios. Cuando otra persona participa en tu progreso, te sientes más responsable y, por lo tanto, es más probable que cumplas con el plan.
Encontrar un compañero de entrenamiento durante los meses de invierno puede darte un impulso extra para ir al gimnasio incluso cuando realmente no quieres hacerlo.
4) Varía tus entrenamientos en climas fríos
El clima invernal puede cambiar y afectar tu rutina con bastante rapidez. Lamentablemente, esa no es la única razón por la que esta época del año puede ser un impedimento.
También es temporada de resfriados y gripe. Para evitar el desánimo y mantener la motivación, es conveniente estar dispuesto a adaptar la rutina de una semana a la otra. También será útil aprender a escuchar al cuerpo y no exigirse demasiado si estás demasiado enfermo.
5) Establezca una rutina
Si ya estás acostumbrado a seguir un horario específico durante todo el año, mantener esos hábitos será algo automático.
Es posible que ya hagas levantamiento de pesas algunos días de la semana y cardio otros. Genial, sigue haciéndolo. Por supuesto, es posible que tengas que hacer algunas modificaciones leves en invierno, pero la motivación automática se incorporará a tu rutina semanal.