Las semillas de chía son las semillas comestibles de la planta de chía. Este cereal ancestral está volviendo a estar de moda, pero hay muchas razones para conservar las semillas de chía a largo plazo. Son un alimento muy versátil repleto de nutrientes esenciales que nos mantienen sanos.
Profundicemos en todos los increíbles beneficios de las semillas de chía.
Alto contenido de proteínas
Las semillas de chía tienen una alta calidad proteica por peso, aportando 4 gramos de proteína por cada 1 oz, lo cual es muy alto en comparación con la mayoría de los alimentos vegetales.
Tienen un perfil de aminoácidos superior que hace que las semillas de chía sean una excelente opción para quienes siguen una dieta basada en plantas.
Los alimentos ricos en proteínas ayudan a mantener el peso corporal y contribuyen a la saciedad, lo que significa que te sentirás lleno y satisfecho después de comer. Además, los alimentos ricos en proteínas ayudan a mantener la masa muscular magra y a mantener el peso corporal.
Alto contenido de fibra
Las semillas de chía están repletas de fibra soluble y mucílago, la sustancia responsable de la textura pegajosa de las semillas de chía humedecidas.
Una onza de semillas de chía contiene 10 gramos de fibra, lo que representa aproximadamente el 40 % de nuestra ingesta diaria recomendada de fibra. El alto contenido de fibra de las semillas de chía puede ayudar en el tratamiento de la diabetes tipo 2 al ralentizar el proceso de digestión y la liberación de glucosa.
También mejora el movimiento peristáltico del intestino y reduce el colesterol plasmático. El consumo de fibra también puede disminuir el riesgo de sufrir enfermedades coronarias y varios tipos de cáncer .
Una dieta con suficiente fibra también ayuda a prevenir el estreñimiento y promueve la regularidad para un tracto digestivo saludable. Los movimientos intestinales regulares son cruciales para la excreción de toxinas a través de la bilis y las heces.
Antioxidantes
Los antioxidantes son sustancias que ayudan a proteger el cuerpo de los radicales libres .
Los radicales libres son sustancias presentes en el organismo que pueden dañar las células y provocar muchos problemas de salud crónicos, como enfermedades cardiovasculares e inflamatorias, cataratas y cáncer.
Las semillas de chía son una gran fuente de antioxidantes con presencia de ácido clorogénico, ácido cafeico, miricetina, quercetina y kaempferol, que se cree que tienen efectos protectores cardíacos y hepáticos, antienvejecimiento y características anticancerígenas.
Alto contenido de ácidos grasos omega-3
Las grasas saludables son extremadamente importantes para reducir la inflamación, proporcionar una fuente importante de combustible para el cuerpo y ayudar a promover el funcionamiento óptimo del cerebro, los nervios y el corazón.
Las semillas de chía contienen una gran cantidad de ácido alfa-linolénico (ALA), un ácido graso omega 3. Los ácidos grasos omega 3 pueden ayudar a prevenir el aumento de LDL y triglicéridos y reducir el colesterol HDL.
La calidad terapéutica de una dieta se ve afectada no sólo por la cantidad de grasas omega-3 consumidas, sino también por su proporción con respecto a los ácidos grasos omega-6. Es importante tener una proporción menor de ácidos grasos omega-6 con respecto a los ácidos grasos omega-3 para ayudar a reducir la prevalencia de enfermedades crónicas.
Cantidades más altas de omega-6 en comparación con omega-3 pueden provocar una inflamación de bajo grado , que con el tiempo puede contribuir a la artritis reumatoide, la aterosclerosis, la dislipidemia, la diabetes, la obesidad y la insuficiencia cardíaca.
Lleno de minerales esenciales
Las semillas de chía no sólo están llenas de fibra, proteínas, antioxidantes y grasas saludables, sino que también contienen una fuente adecuada de manganeso, que es esencial para el metabolismo; fósforo, que ayuda a la salud de los huesos; cobre, que es clave para la salud del corazón; selenio, que es un antioxidante; y calcio, que es esencial para la salud de los músculos y los huesos.
Formas de utilizar las semillas de chía
Reemplazo de huevo
Puede resultar difícil encontrar un sustituto del huevo para los productos horneados veganos, pero las semillas de chía son una excelente opción. Una vez colocadas en agua, las semillas de chía se hinchan hasta adquirir una textura gelatinosa, similar a la de un huevo.
Para preparar el huevo con semillas de chía, combine 1 cucharada de semillas de chía enteras o molidas con ¼ de taza de agua. Deje reposar la mezcla durante unos 5 a 10 minutos hasta que espese y adquiera una consistencia gelatinosa. Esta receta rinde el equivalente a 1 huevo estándar.
Pudin de semillas de chia
El pudín de semillas de chía puede ser un desayuno delicioso o un postre saludable repleto de fibra, grasas saludables y minerales esenciales. Prepárelo usted mismo combinando 1 cucharada de semillas de chía con 1 taza de su leche preferida: de vaca, de avena, de almendras, etc. Para darle más sabor, no dude en agregar miel y frutas como cobertura.
Echarlo en la avena
Una de las formas más sencillas de incorporar semillas de chía a tu dieta es agregar algunas a tu avena. Las semillas de chía le darán más volumen a tu avena y te ayudarán a sentirte saciado hasta la hora del almuerzo.
Granola casera
Las granolas compradas en las tiendas están repletas de azúcar y aditivos. Si preparas tu propia granola, podrás agregar los ingredientes que desees y controlar la cantidad de azúcar que se agrega. Las semillas de chía son un excelente complemento si buscas aumentar el valor nutricional de tu granola casera.
Añadir a batidos
Los batidos son una forma estupenda de incorporar una gran cantidad de alimentos ricos en nutrientes. Las semillas de chía son un excelente complemento para cualquier batido.
Mezclar con la masa para panqueques
Mejora tus panqueques con una fuente adicional de grasas saludables, fibra y proteínas para mantenerte con energía durante todo el día.